Del odio al amor sólo hay un paso

Reproducir video

Perdonar no es olvidar, perdonar es liberar. Es demasiado común el toparnos con esta idea errónea de que el perdonar es excusar un comportamiento, y no es así. No por decidir perdonar a alguien o incluso a ti mismo, significa que estás de acuerdo con que la acción ocurrida o que lo estés validando al aceptarlo, quiere decir que estás abandonando ese resentimiento, esa culpa, ese dolor.

Vivir aferrados nos mantiene aislados y encapsulados en aquello que no permite nuestra evolución y nuestra paz interior. Libérate. Soltar y perdonar no quiere decir que tus errores no sucedieron, quiere decir que eres consciente de ellos, que los aceptas, pero que no hay marcha atrás, sólo marcha hacia adelante.

Tener errores también es parte de una vida equilibrada. NADIE es perfecto. Nadie nace sabiendo con exactitud la manera adecuada de llevar la vida…

Lo más cercano a la perfección, es aquel humano que a pesar de caer, a pesar de equivocarse, lo busca componer, busca mejorar, busca su mejor versión.

Aceptar y seguir. Acciones pasadas, no necesariamente determinan quién debes ser ahora ni quien debas ser después. Está en ti corregir el rumbo.

Nada es imposible, lo imposible solo tarda un poco más.

Soñar, creer y chingarle.

Los chingones somos más.